El Porto della Madonna, llamado también las Piscinas Naturales, la Laguna, el Manto de la Virgen, o en el pasado también el Lago Salado. Este tramo de mar encerrado entre las islas de Budelli, Razzoli y Santa Maria se considera como uno de los espejos de agua más preciosos en el mundo. 

3 hipótesis sobre el origen del nombre

Sobre el origen del nombre hay 3 hipótesis: la primera dice que el nombre se debe a los colores del mar, parecidos al manto de la Virgen en las pinturas religiosas. La segunda afirma que Madonna era el apellido de un pescador de langostas que frecuentaba constantemente este lugar. La tercera hipótesis se refiere a la particular posición de la ensenada que está al abrigo de la intemperie y se cuenta que los que lograban alcanzarla para evitar los golpes de mar, daban gracias a la Virgen porque les había indicado la ruta correcta.

Agua cristalina y bajos fondos

Este espejo de agua cristalina con múltiples matices que varían desde el azul casi transparente al verde esmeralda con algunas variantes de azul oscuro, es de rara belleza. El azul oscuro es debido a la posidonia oceánica, una planta que oxigena el mar y ofrece amparo a miles de microorganismos marinos, muy importantes para el ecosistema del Mediterráneo.

En el Porto della Madonna se a soma la Spiaggia del Cavaliere de Budelli.  En el centro encontramos la Isola Carpa. Frente a la isla Carpa, hacia el este, hay un pasaje estrecho, el Passo del Topo, con muchas rocas de granito semejantes a pequeñas esculturas que salen del agua.

La isla de Razzoli

La isla más al norte que se abre hacia Córcega se llama Razzoli y se reconoce fácilmente gracias a su faro. Lo que caracteriza Razzoli es el granito que aquí adquiere un color rojizo debido a las infiltraciones de filones de cuarzo. Las rocas toman las formas más variadas tanto por debajo como por encima del agua. La profunda ensenada de Cala Lunga es como una galería de esculturas de roca. Razzoli acoge una importante colonia de gaviotas corsas que nidifican en los gruesos nichos naturales de granito. En el centro de la isla hay un valle azotado por vientos fuertes y constantes. El faro de Razzoli en Punta Maestro es imponente. Poblado por los fareros hasta hace unos 50 años tranquiliza a los marineros.

El Passo degli Asinelli (Paso de los Burritos)

El Passo degli Asinelli, que permite salir hacia Córcega por medio de un canal, separa Razzoli de la isla de Santa Maria. El fondo del Passo degli Asinelli (Paso de los Burritos) es muy poco profundo y la fantástica transparencia del agua es debida a la blancura de la arena y al juego de las corrientes siempre presentes. Sólo los barcos con poco calado pueden navegar en este lugar, pero hay que proceder siempre con prudencia teniendo en cuenta las mareas. En el pasado el Porto della Madonna fue un amparo seguro para los corsarios que podían escapar al mar abierto justo por el paso de los burritos. Pero el paso lo utilizaban también los fareros que iban de una isla a otra con sus burros, y el señor Pietro, el último pastor de la isla de Santa Maria, que alcanzaba la isla de Razzoli con sus vacas por la necesidad de alternar la escasez de pasto de las dos islas.